
Cuánto te costará darte cuenta de cómo son las cosas ?
una vez que te des cuenta... (si es que lo hacés...)
Cuánto te costará reaccionar ?
una vez que reacciones (si es que lo hacés...)
Cuánto te costará mantener las cosas ?
una vez que las mantengas (si es que lo hacés...)
Cuánto te costará no perderlas ?
una vez que no las pierdas (si es que lo hacés...)
Qué pensás hacer después ?
Por qué tenemos que vivir tratando de cuantificar todo ?
Por qué no nos damos lugar a disfrutar sin saber cuánto estamos disfrutando ?
Por qué no nos damos un tiempo libre, sin importar cuánto dure ?
Por qué no dejamos de lado todas esas cosas y hacemos lo que queremos, cuando y con quien queremos, sin importarnos el resto ?
Hasta la frase Viví cada momento cómo si fuera el último implica una cuantificación...
Caso contrario, no habría últimos...
Tiremos relojes, computadoras, calculadoras, almanaques, y todo aquellos que nos condicione...
Empecemos a disfrutar en serio, sin importar cuánto...
Cosas como las de la imagen, nos perdemos por el condicionamiento que nos impone un reloj, la vida apurada de la ciudad, o un simple almanaque...
Mientras dormías
esperando el día, caí encandilado
es como un milagro viendo tus alas
-te quedan tan bien.
Hebe Ramone